Como ya adelantó el Servicio de Estudios Redpiso en un informe publicado en diciembre de 2018, el sector inmobiliario viene sufriendo en los últimos meses un estancamiento. La vivienda había subido notablemente y el comprador empezaba a tener dificultades para poder acceder a ella; esto traía como consecuencia que se postergara su decisión de compra y, en muchas ocasiones, se decantase por no hacerla efectiva. Por otro lado, las personas que estaban motivadas por el ascenso de los precios y por las posibles rentabilidades que proporcionaban los inmuebles están desapareciendo. Las empresas tasadoras (por miedo a cometer errores pasados) son más temerosas en sus resultados y el capital extranjero no llega con la misma fluidez.
Por todo ello, se ha producido una ralentización en las ventas. Esta parada no es más que un síntoma de un cambio de ciclo en el sector. El ciclo está en su fase madura y esto traerá consigo consecuencias como el ajuste en el precio de vivienda; por consiguiente, esto podría repercutir en el cierre de muchas agencias inmobiliarias y la bajada de los precios de alquiler de los locales en ciertas zonas (en los dos últimos años ha habido un número de aperturas de agencias muy alto atraídos por los números del sector y la baja inversión inicial de su apertura); los periodos de ventas de los inmuebles aumentarán debido a que el stock subirá.
El sector vive momentos en los que la situación tiende a estabilizarse a un cierto nivel. No obstante, y aunque no se esperan bajadas extremas, similares a la época de la crisis, sí que los precios están bajando en mucha zonas. También se prevé un descenso en el número de compradores debido a esa inestabilidad o falta de confianza, no ayudando los plazos de venta de los inmuebles y la dificultad de sacar todas estas operaciones.
Artículos relacionados
1 Comentario
Efectivamente, el cambio de ciclo ha llegado. Las mayores caídas en los precios, las veremos a finales de 2020 y sobre todo en 2021 y será el momento óptimo de compra, para la inversión en vivienda. Las subidas de precio volverán de nuevo a partir de 2023.
