En los últimos días hemos encontrados en los medios diferentes noticias que hablaban de una moderación de la subida del precio de la vivienda. En este caso se hace referencia al mes de junio, aunque es una tendencia que se ha venido repitiendo últimamente. Desde aquí ya habíamos informado de que esto se iba a producir en el informe de Redpiso publicado tras un estudio realizado por la compañía.
Redpiso, líder en servicios de intermediación inmobiliaria y financiera, llevó a cabo este estudio hace casi un año, habiendo publicado los resultados el 14 de diciembre de 2018. El estudio cuenta con los datos de sus más de 180 oficinas en Madrid capital y la Comunidad de Madrid, y en él se advierte una desaceleración en la evolución del precio de la vivienda, lo que ahora se está revelando como cierto.
El Servicio de Estudios Redpiso alcanzó esta conclusión tras analizar los indicadores más relevantes del sector respecto a los últimos tres años en la región: tiempo de venta, número medio de visitas a los inmuebles, variación anual del precio de venta y cuota de operaciones dedicadas a la inversión. La ralentización detectada por Redpiso también fue acreditada recientemente por el Ministerio de Fomento y el Banco de España con informaciones recogidas en medios de comunicación y coincidentes con los de la inmobiliaria.
Los resultados del informe de Redpiso
Los datos de estos informes oficiales reflejaron la estabilización de precios y señalaban un crecimiento del precio de un 8% interanual en toda la Comunidad de Madrid, cifra alineada con la recogida por Redpiso en su análisis: desde mayo de 2018, los precios han crecido un 9,4% y un 8,9% en la capital y en el resto de la región, respectivamente. Estos incrementos contrastan con las subidas medias registradas por las oficinas de Redpiso en los primeros cinco meses de 2018 y en todo el año 2017 que, comparadas con periodos anteriores, se encuentran en torno al 19% y al 17%, respectivamente.
Manuel Fernández, director general de Redpiso y uno de sus fundadores, explicó en su momento que “la ralentización detectada por nuestro equipo en la subida de precios en Madrid, influenciada en parte por el bajo ritmo de crecimiento salarial en el país, es percibida por compradores e inversores. Esto minimiza su urgencia por adquirir vivienda ante un posible fuerte incremento de precios”. Se trataba, pues, de un crecimiento pausado que iba a contribuir a alejar los precios a los previos a la crisis.
