
Con la llegada del verano son muchos los propietarios que deciden poner su vivienda en alquiler. Pero esto va de la mano de ciertos temores que tienen todos los propietarios por igual, sobre todo en el alquiler vacacional que suele estar mucho más expuesto y ser más ocasional.
Los desperfectos que puedan ocasionar los inquilinos en la vivienda son uno de los principales temores que asolan a los propietarios. Esto va de la mano de la edad y del número de inquilinos: cuantos más y más jóvenes sean pero es el temor. Uno de los consejos que da Redpiso es elaborar un inventario con las cosas que hay en la casa y cuál es su estado firmado por ambas partes. Otro de los temores de los propietarios es el exceso de ocupación de la vivienda, algo relativamente común entre los jóvenes. Esto sucede cuando habitan la casa más personas de las permitidas. También puede darse el caso de que los inquilinos decidan alquilar la vivienda, a su vez, a otras personas.
El impago es otro de los temores de los propietarios que, en algunos casos, permiten cobrar el último día para tener más posibilidades de alquilar el inmueble. Esto es muy arriesgado y lo que se recomienda es pagar la mitad del precio antes, incluyendo la fianza.
Estas situaciones podrían evitarse, por lo menos en parte, con la contratación de un seguro, pero muchos propietarios no quieren gastar más dinero y prefieren arriesgarse.