Este año, el Black Friday llega el día 29 de noviembre y en España los comercios físicos y online ya se preparan para volver a celebrar esta maratón de compras con descuentos suculentos. Durante una jornada, las tiendas dan la oportunidad a los consumidores de adelantar sus compras navideñas a precios rebajados. Cada año cae en una fecha distinta, pero siempre en viernes. El motivo: se celebra un día después de Acción de Gracias, una tradición estadounidense que tiene lugar siempre el cuarto jueves de noviembre.
A pesar de que es una tradición heredada de Estados Unidos, el Black Friday ya es una fecha consolidada también en España. El día de mayores ofertas en el año se llevará a cabo esta vez con unas ventas estimadas en unos 1.600 millones de euros. Es decir, un 10% más que en 2018, según un informe elaborado por Google y recogido por Efe. Esto significa que, en promedio, cada comprador gastará alrededor de 256 euros durante esta jornada, lo que representa un incremento del 8% interanual.
¿Por qué comprar en Black Friday?
La ventaja más destacable es que hay productos que alcanzan su precio más bajo durante este día del año: como multitud de comercios publican las ofertas Black Friday con anterioridad, es posible comparar los precios y elegir el más ventajoso. Incluso existen aplicaciones de comparadores de precios específicos para el Black Friday. Además, diversos vendedores online permiten configurar alertas para conocer cuáles serán sus precios en esta fecha. Con la Navidad a la vuelta de la esquina, estas jornadas de descuentos suponen una oportunidad para comprar regalos o caprichos para uno mismo: electrónica, informática, hogar, cocina, moda, deportes, videojuegos, bricolaje, bebé, juguetes, libros, música, cine, alimentación, belleza…
¿Cuál es su origen?
El Black Friday tiene su origen, como ya sabemos, en Estados Unidos. Se celebra el primer viernes después de Acción de Gracias. Su historia comenzó en los 60, momento en que el comercio minorista estadounidense quería aumentar sus ventas durante las fiestas. No obstante, la expresión Black Friday se empezó a usar con el sentido que hoy conocemos en 1961 en la ciudad de Filadelfia, cuando un boletín público alertaba del caos que se estaba produciendo en las calles por las rebajas del día posterior a Acción de Gracias.
Por qué se llama Black Friday
El término Black Friday se originó en Filadelfia, donde se utilizó para describir el denso tráfico de gente y vehículos que abarrotaba las calles al día siguiente de Acción de Gracias. El uso de este término comenzó alrededor de 1961 entre los oficiales de policía encargados de la regulación del tráfico. Se extendió por todo Estados Unidos a partir de 1975. Con el tiempo, surgió otra explicación al término del Black Friday, refiriéndose al término negro, a las cuentas de los comercios que pasan de estar en números rojos a negros gracias a este día.
¿Cómo aprovechar las ofertas?
Aunque, en un primer momento, las ofertas del Black Friday pueden parecer tan atractivas como para dejarse todo el dinero en compras, la mejor manera de aprovecharlas es con planificación y sin ceder a los impulsos de último minuto. Vamos con algunos consejos que todo comprador debe tener en cuenta antes de adquirir productos por internet durante esta jornada.
Lo más importante: comparar
Como la mayoría de las tiendas online lanzan campañas de descuentos para el Black Friday, te recomendamos revisar todas tus opciones antes de hacer clic en el botón de comprar. Además, hay que tener en cuenta la posibilidad de que las ofertas de determinados productos no sean las mejores del año, como advierte la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que lleva varios años monitoreando los precios en los establecimientos más conocidos y ha encontrado que sólo un 11% de los artículos ofertados son realmente más baratos que en otros días del año.
Evita las compras innecesarias
Si al final del Black Friday te has quedado sin dinero por la euforia de aprovechar los precios bajos de productos que en realidad no necesitas, significa que, al final, no has ahorrado en absoluto. Para evitarlo, puedes hacer una lista con los artículos que te hacen falta o que llevas mucho tiempo persiguiendo como con los regalos de Navidad que ya tengas decididos. De esta manera, en caso de que encuentres una buena oferta, estarás ahorrando realmente dinero.
Consulta las condiciones de compra
Si bien es común que las tiendas online tengan políticas de devolución y reembolso de 30 días, por ley sólo están obligadas a hacerlo en los 14 días posteriores a la compra. Además, tienen permitido cambiar sus condiciones durante los periodos de rebajas, aunque si lo hacen deben notificarlo en un lugar que sea visible para los clientes. Por lo tanto, es importante comprobar esta información antes de pagar, así como guardar el ticket o la factura para cualquier reclamación. También hay que tener en cuenta si el precio mostrado incluye IVA y los gastos de envío, ya que esto podría incrementar considerablemente el coste final y limitar el descuento de los productos.
Comprueba la seguridad de la tienda
Comprar en los sitios más conocidos suele ofrecer suficientes garantías como para saber con certeza que las transacciones son seguras. Sin embargo, ya que muchas otras webs se suman también a la campaña, es recomendable verificar que la tienda sea real para evitar engaños. En este sentido, es buena idea buscar opiniones de otros usuarios en Google. Además, siempre es importante comprobar en las pasarelas de pago que la página esté cifrada (suele mostrarse un candado junto a la dirección web) para evitar el robo de los datos de nuestras tarjetas o cuentas bancarias.