Mudarse de casa puede convertirse en un proceso muy pesado, lento y costoso. Poner en marcha este proceso puede ser muy estresante, no solo desde el punto de vista personal sino también en términos económicos. Está claro que la organización es la clave del éxito para cualquier mudanza. Antes de comenzar hay que planificar bien cómo se va a realizar el embalaje, de qué cosas debes prescindir, qué medio de transporte elegir etc. Si tienes previsto cambiar de domicilio próximamente, desde Redpiso te contamos cómo no gastar tanto en la mudanza:
– Haz limpieza.
Selecciona bien qué cosas vas a llevarte y si realmente tienen cabida en tu nueva casa. Deshazte de todo lo que no necesites para ahorrar (además de dinero) tiempo y espacio. Revisa todas tus pertenencias desde los utensilios de cocina, ropa e incluso muebles y haz un inventario de lo que creas que puedas dejar atrás. Si crees que hay cosas nuevas, pero que ya no vas a utilizar, ponlas a la venta. Es posible que te saques unos euros esos cuadros que tanto te gustaban hace unos años y que ahora se han quedado anticuados, por ejemplo. En cuanto a la ropa, organiza un mercadillo y vende todo lo que ya no te pongas, o dónalo a alguna asociación que se encargue de repartir ropa entre los que más la necesitan.
– Prográmalo todo.
Si vas a contratar a una empresa para que te haga la mudanza debes tener claro que en verano suele ser bastante más caro. Evita también los principios y finales de mes porque los precios tienden a subir. Además, lo mejor de todo es que la hagas entre diario y no los fines de semana. Aprovecha el espacio lo máximo posible porque seguramente te cobren por bultos, así que aprovecha los cajones de los muebles o las maletas (con cosas que no puedan dañarse) para guardar cosas.
– Haz las cosas con tiempo.
Si de verdad quieres ahorrar y con tu trabajo a veces crees que va a ser imposible ponerte a hacer las cosas tú mismo, empieza a organizarte y saca unos minutos a diario para empezar a embalar. Hay empresas que realizar esta tarea tan pesada, pero si te pones tú, tu bolsillo lo agradecerá. Si te lo tomas con tiempo y calma, este proceso tan pesado se volverá mas llevadero en todos los sentidos.
– Piensa bien en la necesidad de contratar un seguro.
Muchas veces, por ahorrar demasiado, puede ser peor el remedio que la enfermedad. Siempre que la empresa embale las pertenencias, podrás acordar una remuneración en caso de ruptura. Pero también en desperfectos en la vivienda al mover los muebles, como roces en la pared o arañazos en el suelo de madera; algo muy importante si estás de alquiler en una casa y quieres recuperar la fianza.