Son muchas las personas que disponen de una segunda vivienda, principalmente en la costa, que permanece cerrada gran parte del año. Son pocos los que se paran a pensar cuántos gastos supone esto y si realmente merece la pena. Así pues, vamos a hacernos una idea de a qué cifra pueden ascender los costes de una casa que tenemos cerrada.
Los gastos más elevados pertenecen a la comunidad y se sitúan entre los 200 y los 1.140 euros al año, dependiendo de las características de la vivienda, del tamaño, de la zona y de la situación. No incluidos en este precio aparecen los suministros tales como el agua o el gas que pueden ascender a 600 euros anuales. ¿Quién está dispuesto a pagar todo esto por una vivienda que permanece cerrada gran parte del año? Pero es que la cosa no acaba ahí, y aparecen otros gastos a los que hay que hacer frente como el IBI (276 euros) o el impuesto de basuras (117 euros). También es conveniente tener en cuenta el correspondiente IRPF que habrá que pagar por disponer de esta segunda vivienda.
Tras analizar estos gastos que ascienden, de media, a 1.791 euros anuales es necesario pensar si merece la pena contar con esta vivienda o no. Alquilar la casa por periodos vacacionales es una opción, pero hay que tener en cuenta las regulaciones de cada Comunidad Autónoma para los alquileres turísticos. Por consiguiente, la opción más conveniente sería vender esta vivienda, lo que implicaría un gran ahorro. Redpiso, una inmobiliaria de amplia trayectoria y con más de 150 oficinas en Madrid, Valencia, Sevilla, Alicante y Cádiz, está a disposición de los propietarios para llevar a cabo la compraventa de inmuebles y ayudar a los clientes permitiéndoles ahorrar.