En todos los hogares, la llegada de un bebé es un momento de felicidad y de grandes emociones. La familia crece y esto implica una serie de cambios en casa, ya que el nuevo miembro necesita unos cuidados y atenciones. Una casa es un lugar seguro, pero cuando un niño vive en ella, se debe tener en cuenta unas determinaciones necesarias para evitar cualquier movimiento peligroso del bebé. En Redpiso queremos daros unos consejos para convertir tu hogar en un lugar seguro.
Es importante adaptar nuestra casa para que nuestro hijo pueda hacer de las suyas sin peligro alguno. Un niño puede jugar dentro de la vivienda, pero es importante que un adulto se encuentre a su lado para ayudarle en su crecimiento. De esta forma, conocerá los peligros de cada zona de la casa. En Redpiso ofrecemos una serie de consejos para convertir tu hogar en un lugar seguro para los niños:
Antes de revisar nuestra vivienda para cambiar aquello que puede ser peligroso, debemos hacer una lista con todo lo que pensamos que es inseguro para nuestro hijo. Lo importante es quitar o esconder los elementos peligrosos que puedan ser accesibles para el niño. Hay que evitar cualquier contacto con objetos pequeños que pueda meterse en la boca.
Aquellos objetos de la vivienda que no pueden esconderse en un cajón, como un enchufe o los picos de los muebles, deben ser tapados rápidamente. La cinta aislante, las pegatinas o las tapaderas, son útiles para poder colocarlos y evitar así cualquier incidente. Es habitual que los niños quieran meter las manos o tocar aquello que le es extraño, por tanto, hay que evitar cualquier tipo de curiosidad por estos objetos.
El suelo de nuestra casa puede ser otro problema para nuestro bebé. Hay que revisar que el suelo esté en buen estado, y así no tendremos ningún disgusto a la hora de enseñar a nuestro hijo a gatear o a andar.
Uno de los grandes peligros son las escaleras de la vivienda. Cuando hay un niño en casa, se deben tapar con una puerta pequeña, y así podremos controlar si nuestro hijo quiere bajar las escaleras. Hay que acompañarle en todo momento para evitar cualquier caída.
Y vosotros, ¿tenéis adaptada la casa para vuestros hijos e hijas?
