La vivienda nueva sigue recuperando el pulso de forma gradual y su construcción subirá ligeramente. Según las previsiones, 2019 terminará con más de 100.000 viviendas iniciadas, cifras similares a las de 2018, cuando según el Ministerio de Fomento se visaron 100.733 permisos para la construcción de nuevas casas. Las estimaciones son positivas si se recuerda que en 2015 se concedieron 49,700 visados aunque están aún muy lejos de los números la Asociación de Promotores y Constructores de España (APCE) considera que se deberían edificar anualmente para poder hablar de un «mercado inmobiliario sano». Es decir, entre 150.000 y 180.000 unidades.
Si hablamos de los precios, la tendencia es al alza, destacando el encarecimiento de la segunda mano con un crecimiento del 4,4% mientras que en obra nueva ha sido del 4,1. En cuanto a la nacionalidad de los compradores, el 17% fueron extranjeros, la gran mayoría de ellos, residentes en España. En relación a la situación de los compradores, el esfuerzo para la adquisición de una vivienda aumenta mínimamente, situándose en un 33,5%.
El caso de la vivienda nueva en Madrid
Una muestra de la recuperación paulatina de la actividad constructora de vivienda nueva es la situación de Madrid, que cuenta actualmente con unas 360 grúas activas en 418 proyectos, frente a las 244 registradas el año anterior, lo que significa que el número de grúas en Madrid ha aumentado un 47%.
De esta forma, el segmento residencial concentra la mayor parte de la actividad constructora en la ciudad, representando el 83% (351) de los proyectos que actualmente se encuentran en construcción, unas 12.000 unidades de vivienda, de los cuales el 84% (298 proyectos) corresponde a promociones de vivienda nueva. Así, los distritos de la periferia de la zona norte continúan liderando la actividad de construcción residencial, con Hortaleza, Fuencarral y Moncloa a la cabeza, que acumulan el 26% de los proyectos residenciales de la capital.
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