Hay muchas razones por las que se terminan produciendo esas dificultades de particulares al vender su casa. Muchas de ellas están ligadas a la cantidad de tiempo que se necesita para atender las labores del proceso de compraventa, que es algo a lo que se dedican de manera profesional las inmobiliarias para ahorrarte ese trabajo y las preocupaciones que conlleva. Vamos a repasar algunos de esos problemas.
Tratar con muchas personas
La compraventa de una vivienda provoca que uno tenga que estar pendiente de muchas cosas, hablar con varias personas al mismo tiempo, responder a cuestiones que quizá de no conozcas del todo… Tendrás que estar pendiente de:
- El comprador, que casi siempre querrá rebajar el precio al máximo posible.
- El agente del comprador, la persona que le representa y que como es lógico buscará las mejores condiciones para su cliente.
- El abogado del comprador, que decide dar su toque al contrato.
- La empresa que hace la certificación, encargada de preparar la etiqueta de certificación que se necesita antes de ponerla a la venta.
- En ocasiones, el banco del propietario, el cual se dedica a gestionar la hipoteca sobre la vivienda a la que se transfiere.
- Los falsos compradores o los que no están del todo interesados.
El resumen es que es necesario tratar con cada uno de estos grupos y uno debe de saber defender sus intereses ante las peticiones de cada uno de ellos. Esta es una de las mayores dificultades de particulares al vender su casa.
Cómo preparar la vivienda antes de enseñarla
Otra preocupación es cómo presentar la vivienda a la hora de las visitas. Hay algunos procedimientos básicos que son de sentido común (por ejemplo, la limpieza y el orden), pero otros necesitan asesoramiento de profesionales. Ordenar las habitaciones, pintar las paredes, llevar a cabo las reparaciones que se necesiten, limpiar suelos y alfombras, cambiar las lámparas y las bombillas que no funcionen, retirar objetos personales…
Cualificar a los compradores potenciales
Otra de las dificultades de particulares al vender su casa tiene que ver con el comprador. Lógicamente, uno no hace trabajos de investigación sobre el interesado, pero sería una buena forma de empezar saber si tiene capacidad económica para hacerse la vivienda. También lo sería saber si es una persona que se encuentra en la etapa primera de búsqueda de vivienda o necesita comprar en un plazo corto. Estas “investigaciones” sí puede hacerlas un agente inmobiliario.
Responder a las dudas de comprador
Cada comprador es un mundo y pueden hacer preguntas muy diferentes. Desde las más básicas hasta las más específicas, es posible que en algunos casos el propietario no sepa responder. Se entiende que el comprador está haciendo una inversión importante, porque también es comprensible que pregunte no sólo por el estado de la vivienda y sus características, sino también por otros datos que sean de su interés.
Las cuestiones de los contratos
Los contratos de compraventa entre las partes en ocasiones no son asequibles a todo el mundo. Existen muchas cláusulas que deben tenerse en cuenta además de cuestiones hipotecarias, posibles herencias, plusvalías y otro tipo de impuestos que afectan a cada una de las partes implicadas en la compra. Muchos compradores no finalizan la compra al no generarles confianza el contrato que redacta el propietario.
Uso de nuevas tecnologías y herramientas profesionales
La formación del asesor inmobiliario actualmente también va enfocada a conocer las herramientas del marketing. En caso de que no tengan los conocimientos se dedican a contratar a profesionales en el tema. Los servicios fotográficos o de vídeo suelen realizarse en muchos casos con cámaras profesionales e incluso por fotógrafos profesionales que de esta manera permiten que se puedan tomar unas instantáneas superiores a las que podría realizar un particular. Esta es otra de las dificultades de particulares al vender su casa, ya que no es algo que esté al alcance de todo el mundo.
Establecer el precio de mercado
Un propietario particular puede saber algún precio de los pisos que se venden en la zona y lo normal es poner un precio similar o superior. Los agentes inmobiliarios suelen tener datos contrastados sobre las viviendas que se venden y las que no se venden en su zona, por lo que poseen los conocimientos para saber los precios en los que sí se puede conseguir la venta del inmueble.
Difusión limitada del anuncio particular
Un particular pone el anuncio de vivienda en varios portales, ya que además en muchos se puede hacer gratis. La buena presencia en esos portales tiene un coste y en los últimos años proliferan los portales que sólo permiten la publicación mediante agencias especializadas a la hora de realizar la gestión inmobiliaria. Esta es uno de las dificultades de particulares al vender su casa que deben afrontar. Lo más común es trabajar en exclusiva, recayendo esa exclusividad de gestión sobre la inmobiliaria y, de manera específica, sobre el asesor inmobiliario que se asigne a la propiedad. Además, será la propia agencia inmobiliaria quien promocione la vivienda en su sitio web.
Cerrar la compraventa
Antes de que se cierre la operación inmobiliaria debemos tener todo esto en cuenta:
- La supervisión técnica de la casa debe haber sido satisfactoria.
- El contrato debe aprobarlo la parte compradora.
- Comprobar que el comprador tenga el monto para afrontar la financiación de la vivienda.
- Hay que tener constancia de que los cálculos de los impuestos y los costes de la notaría nos cuadran y son los correctos.