¿Nunca habéis jugado al famoso Monopoly? ¿Qué pasaría si trasladásemos este mítico juego a la vida real? Haciendo una comparativa, se descubren grandes diferencias entre los precios de unas calles y otras de la ciudad madrileña. Así, hay grandes contrastes tanto en la rentabilidad como en el precio medio por metro cuadrado de las calles más caras y más baratas de la capital.
Las zonas de Lavapiés y Ronda de Valencia (1) son de las más baratas de la ciudad a pesar de encontrarse muy cerca del centro. Su precio medio por metro cuadrado es de 2.430 euros y su rentabilidad es del 5,23%. Las zonas de Avenida Reina Victoria, Bravo Murillo y Cuatro Caminos (2) tienen un precio por metro cuadrado de 2.720 euros y una rentabilidad del 5,15%, más baja que la anterior. Alcalá, Gran Vía y Puerta del Sol (3), al contrario de lo que pueda parecer, no ofrecen los precios más caros. Su metro cuadrado cuesta, de media, 3.260 euros y ofrecen una rentabilidad del 5%. Después, con un precio por metro cuadrado de 3.600 euros, estarían las zonas de Plaza de España, Bailén y Reyes Católicos (4), ofreciendo una rentabilidad del 4,91%, ligeramente inferior a la de anteriores zonas. Alberto Aguilera, Fuencarral y Glorieta de Bilbao (5) ocuparían la siguiente posición con un precio por metro cuadrado de 3.650 euros y una rentabilidad del 4,89%. A continuación se encontrarían Paseo de la castellana y Paseo del Prado (6) que, al contrario de lo que ocurre en el famoso juego del Monopoly, no ocupan la mejor plaza en cuanto a precio. Su metro cuadrado cuesta 3.690 euros y su rentabilidad es del 4,88%. En penúltimo lugar, Avenida de América, Cea Bermúdez y María de Molina (7) ofrecen una rentabilidad del 4,87% y su precio por metro cuadrado es de 3.750 euros. El precio más caro por metro cuadrado, de 5.600 euros, corresponde a Felipe II, Velázquez y Serrano (8), con una rentabilidad del 4,35%.
Se pueden observar así grandes variaciones en los precios y rentabilidades de las diferentes zonas de la ciudad de Madrid. Los precios en el metro cuadrado, correspondientes a la compra de casas, presentan grandes diferencias; pero las rentabilidades, pertenecientes al alquiler de viviendas en Madrid, son parecidas en todas las áreas.