Muchas personas aprovechan los días libres del verano para llevar a cabo reformas en casa. Ahora bien: ¿tienen la obligación de repetir el trabajo cuando está mal realizado? ¿Se pueden utilizar materiales usados? ¿Me pueden exigir el pago de los trabajos antes de comenzar con las obras? Estas son algunas de las preguntas que suelen hacerse quienes se plantean hacer una obra en casa. Para solventar sus dudas, el Portal del Consumidor de la Comunidad de Madrid ha colgado en su página web una serie de recomendaciones a tener en cuenta ante una reforma.
Qué derechos tienen los consumidores a la hora de reformar sus hogares, qué hay que saber antes, durante y después de la contratación de los servicios profesionales… Estos son algunos de los consejos para evitar disgustos.
Presupuestos
Siguiendo los consejos de la Comunidad de Madrid, lo primero que hay que tener en cuenta ante una reforma es pedir varios presupuestos, con el objetivo de poder seleccionar el mejor en relación calidad-precio. Además, es conveniente recurrir a empresas y profesionales acreditados, que tengan capacidad para responder ante posibles contratiempos que puedan surgir.
El profesional o empresa que contrate para estos servicios debe tener siempre a disposición del consumidor una hoja informativa donde se especifiquen los precios por tiempo de trabajo y los gastos de desplazamiento, así como los precios de otros servicios que oferten. Todos ellos, llevarán incluidos los impuestos o bien una nota indicando que hay que añadírselo.
En los presupuestos presentados debe quedar claramente reflejado, entre otros aspectos:
- Los datos de la empresa y el cliente
- La cantidad, calidad y precio de los materiales utilizados
- El precio de la mano de obra
- El precio final
- La fecha de inicio y fin de las obras
- El período de garantía
Desde la Comunidad de Madrid se subraya que la empresa puede cobrar al cliente el importe de la elaboración del presupuesto, siempre que le hayan informado previamente de esta condición y cuando, una vez solicitado y realizado, no lo acepte. Además, los gastos de desplazamiento para su realización solo tendrán que abonarse una vez, aunque hayan sido necesarios varios viajes para concretarlo.
Si una vez realizado el presupuesto, surgieran averías o defectos ocultos, la empresa deberá informarle de ellos, por escrito e indicándole el incremento del importe que supone ese cambio. Cualquier variación en el presupuesto deberá constar por escrito y ser firmadas y autorizadas por el consumidor.
Materiales nuevos
Otro aspecto a tener en cuenta ante una reforma es que el material de la obra debe ser nuevo salvo que se haya pactado otra cosa previamente y esté recogido en el presupuesto firmado. Además, si durante la misma surgieran averías o defectos con los que no se contaban, la empresa deberá informar de ellos por escrito, indicando el incremento del importe que va a suponer esta contingencia.
Una vez finalizada la obra, el cliente debe exigir la correspondiente factura con los trabajos realizados, donde deberá constar el precio total desglosado: materiales utilizados, mano de obra, impuestos, etc. Si se hubiese pactado algún sistema de pagos parciales durante la realización del trabajo, la empresa contratada debe facilitar una factura con los importes. La Comunidad también recuerda la importancia de exigir siempre facturas de todos los pagos que se realicen, así como de conservar el presupuesto y la factura facilitada, pues será de mucha utilidad en caso de reclamación.
Infracciones y reclamaciones
Este documento también nos recuerda las incidencias que el consumidor puede reclamar:
- Obras que no se ajustan a lo presupuestado
- Incumplimiento de las normas relativas a la documentación, información o registros
- Cuando no se solucionan de forma inmediata los problemas surgidos
- Cuando la obra se alargue más de lo estipulado
Es importante señalar que como consumidor puede exigir a la empresa o profesional con quien contrató el servicio responsabilidades en caso de que se haya producido algún tipo de problema en la obra, aunque la persona que la haya ejecutado hubiera sido subcontratada por esa empresa.
El tiempo de garantía del servicio prestado es el que ofrezca la empresa y tiene que venir reflejado en la factura. En el caso de las piezas y materiales, será de dos años, si son nuevas, y de uno, si son usadas.
En caso de no estar conforme con alguno de los servicios prestados, puede solicitar una hoja de reclamaciones y presentarla en la Oficina Municipal de Información al Consumidor más cercana a su domicilio, en la Dirección General de Comercio y Consumo de la Comunidad de Madrid, o a través de Internet.